El Día Internacional de la Mujer debe servirnos para recordar que hace 108 años las mujeres de aquella época decidieron luchar por la búsqueda de igualdad. Hoy, en pleno siglo XXI, la brecha de desigualdad aún es evidente, pero el aporte de la mujer a la sociedad es cada vez mayor.
El 8 de marzo de 1910, durante la Conferencia de Copenhague, se estableció el Día Internacional de la Mujer. La idea de la efeméride surgió de dos perspectivas. La primera fue erradicar el abuso y el maltrato a la mujer y la segunda, la búsqueda de la igualdad laboral, el derecho al voto y la apertura a cargos públicos. Se recuerda, además, la muerte de 123 obreras a causa de un incendio en una fábrica de Nueva York: no pudieron abandonarla porque estaban encerradas.
Ante estos hechos se manifestaron las primeras mujeres luchadoras. A las actuales les corresponde conquistar nuevos espacios y reivindicar sus derechos, como sucedió en 1910. De la mano con la sociedad, deben compartir el compromiso para lograr la mejora del país. Nuestra esperanza radica en que las mujeres conquistemos nuestros derechos, con perseverancia y compromiso.
El aporte de las mujeres en nuestro país se evidencia en diferentes actividades, como la política, el hogar, la ciencia, el arte, las letras, la academia, el deporte y el mundo empresarial. En el índice global de brecha de género, el Perú se ubica en el puesto 80, un resultado que debe preocuparnos a todos. Los líderes de las organizaciones tienen el reto de cambiar esta realidad.
Solo el 61 % de las mujeres en edad de trabajar se encuentran en actividad, por lo que la representación laboral femenina aún es baja.
Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), solo el 61 % de las mujeres en edad de trabajar se encuentran en actividad, por lo que la representación laboral femenina aún es baja. La llamada brecha salarial entre mujeres y hombres en el Perú es del 29.7 %. Los trabajos orientados a resultados, y no al horario rígido en la oficina, pueden ser relevantes para las mujeres con niños.
Nuestro país ocupa el tercer lugar en el mundo en casos de violencia contra la mujer, después de Bangladesh y Etiopía. Según estudios sociales, existe un estereotipo cultural machista aún no superado. A pesar de ello, en el mundo empresarial se está produciendo un despegue de las mujeres. Hoy lideran en la política y dirigen empresas o instituciones académicas en distintos roles. Eso va de la mano con los objetivos que nos hemos trazado para el futuro.
Ser mujer es una condición natural que nos motiva a esforzarnos y a ser parte de una sociedad, de una familia y de una empresa. Buscamos lograr resultados en todos los ámbitos, cada uno con retos distintos. Por ejemplo, la mujer ejecutiva requiere, por parte de las empresas, el trato equilibrado. Mi mensaje para todas las mujeres es que sigan adelante con sus objetivos, que combinen las distintas facetas de sus vidas, que busquen el equilibro en las organizaciones y luchen, como siempre, por sus derechos. Sigamos trabajando para reducir la brecha de desigualdad, por el bien de la sociedad. ¿Cuál es tu mensaje para la mujer peruana en este día especial?
Solo el 61 % de las mujeres en edad de trabajar se encuentran en actividad, por lo que la representación laboral femenina aún es baja.
Doctora en Ciencias Económicas (Ph.D. in Economics) - WHU - Otto Beisheim Graduate School of Management, Koblenz, Alemania. Magíster en Administración - ESAN, Lima, Perú. Ingeniera Industrial - Universidad de Lima, Lima, Perú. Profesora de Liderazgo y Comportamiento Organizacional (MBA y Maestrías Funcionales). Profesora de Gerencia Estratégica (MBA y Maestrías Funcionales). Miembro del Área Académica de Administración. Actualmente es decana de ESAN Graduate School of Business.
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A pesar de que las universidades registran más mujeres matriculadas que hombres, la presencia femenina en el mercado laboral aún es menor, debido a muchos factores socioeconómicos que debemos analizar.
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