Según datos de Bloomberg, más de US$ 785,000 millones han salido de los mercados emergentes para buscar refugio en activos más sólidos. Eso evidentemente causa bastantes problemas a nivel macroeconómico en las economías latinoamericanas y, con ello, una fuerte depreciación al tipo de cambio.
El primer afectado es China, de donde han salido capitales de fondos de inversión extranjeros que estaban invertidos en ese país por más de US$ 650,000 millones, lo cual ha ahondado la baja en el desempeño económico de esa nación. También ha causado bastantes problemas a los países que tienen relaciones comerciales fluidas con el mercado chino, tal es el caso de Perú
En el corto plazo no se ven posibilidades de algún repunte de las monedas latinoamericanas frente al dólar, por lo que nuestra sugerencia para las empresas es que todavía sigan con cautela la evolución de la economía en general y la del tipo de cambio en particular. Evidentemente, las empresas vinculadas a las exportaciones y que generan flujos de divisas distintas a la nacional tienen un respiro y se ven beneficiadas por el incremento del tipo de cambio pero deben tener una adecuada administración de riesgos para poder capitalizar ese beneficio.
En cuanto al manejo financiero, todavía se esperan tiempos difíciles para las empresas endeudadas en moneda extranjera y para las que dependen de la importación de insumos que son adquiridos en dólares. Por ello, recomendamos un sistema de administración de riesgos donde se utilicen esquemas de cobertura y esquemas de fijación de tipos de cambio a plazo. En estos últimos es posible la utilización de algunos derivados como son los tipos de cambio adelantados o forwards. Con ello, se podrá generar una mayor certidumbre que disminuya el riesgo de un golpe más fuerte a las empresas.
Uno de los factores de éxito para las empresas exportadoras tiene que ver con la diversificación, tanto de su oferta como de sus mercados de destino. Así, deben evitar concentrar exclusivamente sus exportaciones o sus ventas en pocos productos o en un mercado específico. Se aconseja que busquen exportar a diferentes continentes y con ello amortiguar efectos o situaciones negativas como las que se presentan.
Además de China, que es un mercado muy grande, hay que mirar a otro mercado como es la India, con el cual Perú no tiene mucha relación comercial. También apuntar a las economías europeas. Hay que evaluar los tratados comerciales que existen con cada uno de los países y buscar aquellas oportunidades de negocio que ya estén encaminadas mediante acuerdos bilaterales de tal suerte que sea accesible la oportunidad de entrar a esos mercados y que sea sencillo hacerlo para poder tener esos canales alternos que nos permitan amortiguar los choques.
Finalmente, hay que mirar con cautela qué pasará en el corto plazo y en el mediano plazo, porque los indicadores pueden resultar muchas veces engañosos. Tendremos que ver realmente cómo evoluciona la economía y analizar el impacto que vamos a tener en el comercio internacional para poder con ello delimitar una estrategia que nos permita ser sustentables en el mediano plazo. En ese horizonte debemos tomar en cuenta la reciente firma Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica, conocido como TPP, un tratado de libre comercio multilateral que involucra el 40% del PBI mundial y en el cual participa Perú.
¿Qué recomendaría usted a las empresas para hacer frente al fortalecimiento de la divisa norteamericana?
Director de Administración y Finanzas de PACCSA. Socio líder de la práctica de Capital Markets y Fusiones y Adquisiciones en SALMO SERVICIOS CORPORATIVOS, S.A. DE C.V. Fue Subdirector de Operaciones en el área de Divisas de Vector Casa de Bolsa. Se desempeñó como Director de Marca de BMW Galería en el Noreste de México.