"Mientras el sector académico no logre articular una oferta ad hoc, el sector empresarial se verá obligado a cubrir puestos de trabajo con personal hecho a su medida. La cadena de Hoteles Libertador es el mejor ejemplo de ello, pues ha desarrollado su propia escuela de formación para capacitar a su personal. Si esta es la tendencia en el sector, ¿necesitamos en el mercado profesionales con carreras técnicas y no universitarias?”, comenta Otto Regalado, profesor de ESAN.