La cadena de suministros comprende el conjunto de operaciones y actividades necesarias para la generación de valor y distribución de bienes y servicios hasta el consumidor final. Se trata de una función logística y estratégica fundamental en una empresa. Por ello, es importante gestionarla adecuadamente para mantener su buen desempeño.
Sin embargo, los objetivos de la gestión de cadenas de suministro pueden verse afectados por diversos riesgos. Generalmente, asociados a la volatilidad del entorno, inestabilidad económica, política, social, tendencias tecnológicas y –especialmente– por la interdependencia global de los mercados. A continuación, profundizamos en cada uno de ellos:
El consumo de materias primas es cada vez más alto, sobre todo en las industrias manufactureras. Si bien existen esfuerzos por reutilizar y reciclar algunos componentes, aún son insuficientes. La escasez de materiales puede generar un incremento en el precio del producto final hasta la incapacidad de cumplir con la demanda del mercado.
Los fenómenos naturales escapan del control de las empresas, afectando el flujo de transporte y abastecimiento. Respecto a los problemas sociales, de acuerdo a la Defensoría del Pueblo (2021), en febrero del año pasado se registraron 197 conflictos de este tipo en Perú. Estos sucesos interrumpen la logística entrada y salida de una compañía, generando demoras y sobrecostos en la provisión y transporte de materiales.
La inestabilidad política es otra gran amenaza para la cadena de suministros. Un contexto negativo podría cesar los acuerdos comerciales internacionales y la inversión interna y externa. Por otro lado, cuando existen tensiones políticas, se pierde confianza en los mercados y la actividad comercial podría empezar a ralentizarse y detener a gran escala.
Las empresas deben verificar que todos sus proveedores funcionen formalmente y de acuerdo al marco legal del sector. La reputación de una empresa depende no sólo de la calidad de sus productos, sino del respeto a la propiedad intelectual y buenas prácticas empresariales.
A medida que una empresa está más interconectada y digitalizada, se vuelve más vulnerable a los ciberataques y pérdida de información crítica del negocio. En especial, si no se toma medidas técnicas preventivas y contractuales durante la tercerización de actividades críticas que incluyan el manejo de información por los proveedores. Según Check Point Research (2022), hubo un aumento del 50 % de ciberataques en 2021.
Los ataques cibernéticos pueden provocar interrupciones en la operación de una compañía, lo que podría derivar en un fuerte impacto financiero y reputacional. Asimismo, la fuga de información sensible de una compañía, bajo la modalidad de ciberespionaje, podría restar competitividad al negocio.
Las cadenas de suministros son la columna vertebral de los mercados del cual son parte las organizaciones. Para Camacho, Gómez y Monroy (2012), gestionar las cadenas de suministros con eficacia “garantiza el adecuado cumplimiento de los procesos internos para dar como resultado un producto terminado en óptimas condiciones junto con su debida distribución” (p.4). Estos son los pasos para detectar, anticipar, mitigar y –en la medida de lo posible– evitar riesgos en ella:
1. Identificar los riesgos. Se debe realizar una lista de los potenciales riesgos y definir sus características. Asimismo, es importante medir su alcance.
2. Valorar los riesgos. Consiste en determinar las posibilidades de que suceda el riesgo y medir el impacto que tendría sobre la cadena de suministros. Para ello, resulta útil crear modelos o simuladores de alcance.
3. Crear un plan de acción. Se trata de desarrollar una estrategia para afrontar el riesgo. Fijar las acciones a seguir, considerando presupuestos y recursos disponibles.
4. Ejecutar el plan. Se debe ejecutar la estrategia definida previamente y monitorear los resultados. Asimismo, es recomendable sostener reuniones periódicas para analizar eventuales cambios o mejoras en el plan.
En definitiva, gestionar de manera óptima las cadenas de suministros es clave para el crecimiento y la sostenibilidad de las empresas que la conforman. Por ello, es necesario apoyarse en la tecnología para identificar y mitigar los riesgos que dificulten el logro de los objetivos, entre ellos: minimizar costos, flexibilidad y agilidad operativa, trazabilidad y control de los activos que fluyen a los largo de la cadena de suministros.
Fuentes:
Consultado a: Freddy Alvarado Vargas, profesor del curso “Tendencias tecnológicas para procesos logísticos” y director de la Maestría en Gestión de la Ciberseguridad y Privacidad de ESAN.
Blog Solistica. (2020, 8 de diciembre). Gestión de riesgo en la cadena de suministro.
Kerr, A. (2018, 22 agosto). Cinco áreas de riesgo en la cadena de suministro.
Marsh. (s.f.). El aumento de los riesgos en las cadenas de suministro.
Seguros SURA. (2022, 29 septiembre). Los ciberataques a las cadenas de suministros ya son récord.
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