A lo largo de la historia de la administración han surgido diversas escuelas, teorías o enfoques, cada una caracterizada por un elemento central que predomina en sus fundamentos teóricos y aplicaciones prácticas. Estas corrientes han influido notablemente en los estilos administrativos de los ejecutivos. A continuación, presentamos algunos de los perfiles ejecutivos clásicos, junto con su característica administrativa esencial. Es importante señalar que estas categorías no son necesariamente excluyentes entre sí:

Enfoque de la Administración Científica – Hombre Económico

Este es el primer enfoque formal de la historia administrativa, desarrollado por los pioneros Frederick Taylor y Henry Fayol. Esta escuela enfatiza el análisis del trabajo, el estudio de tiempos y movimientos, la división y especialización del trabajo, la estandarización de métodos y maquinaria, así como los incentivos salariales y premios por producción. Asimismo, establece los principios administrativos de planeación, preparación, control y ejecución, y define funciones empresariales como la administración, comercial, financiera, técnica, de seguridad y contable.

El perfil ejecutivo asociado a este enfoque es el Hombre Económico, caracterizado por su enfoque en la gestión eficiente de recursos, productividad, rentabilidad y una relación impersonal con los trabajadores.

Enfoque de la Administración Humanista – Hombre Social

Este enfoque surge con la intención de valorar al trabajador mediante la creación de trabajos motivadores y la gestión de sus aspectos emocionales, tanto en relaciones formales como informales con sus compañeros. Se enfatiza la importancia no solo de la remuneración financiera, sino también de la satisfacción emocional y espiritual. Elton Mayo, a través del experimento de Hawthorne, es uno de sus principales referentes, junto con Fritz Roethlisberger, Mary Parker Follett y Douglas McGregor.

El perfil ejecutivo aquí es el Hombre Social, que busca el desarrollo personal y la integración con sus compañeros.

Enfoque de la Administración Neoclásica – Hombre Administrativo

Este enfoque retoma y complementa postulados de la administración científica, consolidando el proceso administrativo: planeación, organización, dirección y control. Identifica distintos tipos de organizaciones, como las lineales, funcionales y línea-staff, y promueve la Administración por Objetivos (DPO) propuesta por Peter Drucker. Entre sus principales autores destacan Harold Koontz, Ernest Dale y Cyril O’Donnell.

El ejecutivo de este enfoque, denominado Hombre Administrativo, se preocupa por configurar estructuras organizacionales y promover la coordinación y cooperación entre jefe y subordinado, en busca de objetivos comunes viables y efectivos para la empresa y el colaborador.

Enfoque de la Administración Burocrática – Hombre Burócrata

Caracterizado por un cumplimiento estricto de normas, reglamentos, procesos estandarizados y una estructura jerárquica formal, este enfoque se basa en la igualdad de trato, la profesionalización del personal y la meritocracia. Max Weber es el principal propulsor de esta corriente, complementado por autores como Robert Merton, Philip Selznick y Alvin Gouldner.

El perfil ejecutivo aquí es el Hombre Burócrata, quien ejecuta funciones siguiendo rigurosamente la reglamentación vigente, priorizando la formalidad y el apego a la norma por encima del criterio personal.

Enfoque de la Administración Estructuralista – Hombre Organizacional

Este enfoque pone énfasis en la contextualización de diversos tipos de organizaciones —coercitivas, normativas y utilitarias (Amitai Etzioni)—, tanto formales como informales, y en las relaciones internas y externas que mantienen. Entre sus autores se encuentran Peter Blau y Richard Scott. El perfil ejecutivo que adopta este enfoque es el Hombre Organizacional, que busca desarrollar la “sociedad de organizaciones” integradas para contribuir al desarrollo social.

Enfoque de la Administración Comportamental – Hombre Relacional

Valora la gestión de las relaciones humanas, tanto formales como informales, apoyándose en ciencias del comportamiento como la psicología, sociología y filosofía. Se enfoca en conocer y aprovechar el talento humano, considerando sensaciones, percepciones, personalidad, valores e inteligencias para desarrollar competencias ejecutivas tales como liderazgo, trabajo en equipo, motivación, comunicación, toma de decisiones y negociación de conflictos. Entre sus principales referentes están Abraham Maslow, Frederick Herzberg y David McClelland. El perfil ejecutivo es el Hombre Relacional, que promueve la integración humana con colaboradores y demás stakeholders.

Enfoque de la Administración Sistémica – Hombre Sistémico

Basado en la Teoría General de Sistemas, este enfoque integra aportes interdisciplinarios de ciencias como la biología, física, sociología y antropología, buscando soluciones holísticas aplicables en distintos ámbitos. Ludwig Von Bertalanffy es su principal referente, junto con Norbert Wiener, Herbert A. Simon y Stafford Beer. En administración, un sistema se define como un conjunto de elementos interrelacionados que transforman insumos en productos o servicios, manteniendo un equilibrio dinámico (homeostasis). Surgen aquí aplicaciones cibernéticas e informáticas como sistemas integrados de gestión (SIG), ERM, CRM, SCM, e-commerce, entre otros. El ejecutivo asociado es el Hombre Sistémico, un solucionador de problemas con visión holística y permanente conexión con su entorno de negocios.

Enfoque de la Administración Matemática – Hombre Decididor

Este enfoque desarrolla métodos y modelos para la toma de decisiones ante problemas estructurados y no estructurados, bajo condiciones de certidumbre o incertidumbre. Utiliza bases algorítmicas y heurísticas para apoyar decisiones fundamentadas, buscando minimizar riesgos. La investigación de operaciones es un campo clave de aplicación. Entre sus representantes destacan Herbert Simon, Igor Ansoff, West Churchman y Russell Ackoff. El perfil ejecutivo es el Hombre Decididor, que asume riesgos con una actitud directa, rápida y consistente, apoyado en modelos cuantitativos, cualitativos o híbridos.

Enfoque de la Administración Situacional – Hombre Contingencial

Este enfoque sostiene que la gestión y el desempeño empresarial dependen del contexto en el que operan, incluyendo sector económico, modelo de negocio, cultura organizacional, perfil de competencias del equipo y el tiempo y espacio de evolución de la empresa. Entre sus autores principales están Paul Hersey, Ken Blanchard y Fred Fiedler.

El perfil ejecutivo se denomina Hombre Contingencial o Situacional, ya que debe adaptarse a cada experiencia empresarial, reconociendo que no existen dos organizaciones idénticas.

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