Kety Jáuregui, profesora de ESAN y directora de la Maestría en Organización y Dirección de Personas, es co-autora del informe "Barómetro DCH - La Gestión del Talento en Perú 2018" que tuvo como objetivo identificar las tendencias más destacadas en la gestión del talento en las empresas peruanas. A continuación, la entrevista concedida a Gan@ Más.
¿Cómo podría resumir el informe que han presentado?
Este es un informe que nos da indicadores de cómo está nuestra gestión de recursos humanos, indicador que no tenemos en el Perú. Fue muy difícil hacerlos y traer la data, porque nuestros ejecutivos no están acostumbrados a responder encuestas como sí sucede en otros países donde hay mucha más investigación. Aquí todavía se toma como una pérdida de tiempo. No quieren o tienen miedo, es por eso que no hacen muchas evaluaciones de desempeño y el clima laboral no funciona, porque no tenemos esa cultura investigación.
Y entre las conclusiones más importantes, ¿qué nos podría comentar? ¿Estamos mejor o peor en comparación con otros países?
Yo creo que estamos muy parecidos con Europa, principalmente con España, y esto es gracias al efecto de la globalización. Sin embargo, tenemos una limitación en este estudio y es que se hizo con data de empresas grandes. No tenemos una data de cómo está la empresa peruana, mediana o pequeña, y mucho menos micro, en recursos humanos.
Como ventajas del mundo digital, ¿cuál es la que usted más destaca en gestión de recursos?
Yo creo que el tema está en tener una muy buena base de datos, siempre. Nosotros tenemos que dar un servicio a nuestros colaboradores, sabiendo su background, sus antecedentes y cómo se comportan. También tener un repositorio y de ahí poder sacar reportes, pero si no tenemos esa información base, digital, será imposible obtener información.
¿Qué tienen en común las grandes empresas españolas con las peruanas?
Las grandes empresas de ambos países tienen en común la inclusión. También el contratar a gente joven, y su preocupación por cómo comprometer más al trabajador y ver que las desvinculaciones sean las más amigables posibles.
En la actualidad, ¿hay más esfuerzos de parte de las empresas por saber cómo está el colaborador interno y por vincularlo más para mejorar su desempeño?
Yo creo que sí. Las empresas grandes están preocupadas por retener a sus talentos o, en caso se vayan, que hablen bien de ellas, por un tema de marca o reputación. Las redes sociales son muy poderosas a la hora de hablar mal de una marca y un colaborador, en uno o dos días, puede dañar la imagen de la empresa que no puede arriesgarse a que eso suceda. Es por ello que recursos humanos está haciendo nuevas prácticas y buscando globalización para que el colaborador esté contento. No podemos tener denuncias, no podemos tener nada a fuera que malogre la imagen de la empresa.
En el Perú, los esfuerzos de las empresas informales en cuanto a la gestión de recursos ¿son distintos a las empresas formales?
Exacto. En la informalidad vimos el caso de las malvinas, en esas prácticas de recursos humanos aún vemos el abuso del microempresario, pero no creas que lo hacen adrede, más bien lo hacen por desconocimiento o por ignorancia. El tema también de mucha migración venezolana, actualmente, no nos ha ayudado mucho; más bien ha incrementado esta informalidad.
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Fuente: Revista Gan@ Más