El sector financiero es la industria que más invierte en ciberseguridad en el Perú por las regulaciones exigidas por la SBS. A pesar que ASBANC afirma que los bancos respondieron de manera adecuada ante los ataques cibernéticos el pasado mes de agosto, no se puede afirmar que los bancos peruanos son infalibles. Existen casos comprobados en el último año donde las entidades bancarias han sufrido pérdidas millonarias de dinero por código malicioso como Carbanak distribuido por spear phishing o Ploutus que se focaliza en atacar cajeros automáticos. Estos eventos de perdida solo son de conocimiento en las entidades financieras para mantener su riesgo reputacional controlado. Ante el crecimiento de estas amenazas cibernéticas las compañías están obligadas a asignar mayor presupuesto en seguridad, no solo en adquisición de tecnologías de ciberseguridad, sino también, en la gestión de estrategias de ciberseguridad y ciber resilencia, así como, capacitar a los colaboradores sobre los nuevos riesgos digitales de manera constante.
Fuente: La República