
Con el pasar de los años se siguen viendo casos de confrontación entre empresas y ONG. Mayormente son conflictos por disputas de impacto ambiental, pues las ONG (que velan por el uso de procesos o recursos sustentables) limitan el trabajo de una organización privada. Sin embargo, ahora las compañías socialmente responsables se están convirtiendo en grandes aliadas, pues con buenas prácticas es posible llegar a un acuerdo y colaboración bajo un mismo propósito: la responsabilidad social.
Las empresas, hoy en día, son más responsables socialmente y ambientalmente. Muchas de ellas se han adaptado a las tendencias actuales y necesitan mejorar su reputación frente a los consumidores. Actualmente, los usuarios requieren que las organizaciones tengan valores notables, no dañen el medio ambiente y sean responsables con sus productos y servicios. También se habla de la igualdad de género y de prácticas internas que promuevan la seguridad y la salud de los colaboradores. Todo esto suma en una compañía al momento de venderse como marca y ser atractiva para inversionistas, consumidores, proveedores y otros agentes.
Las confrontaciones generan denuncias públicas, protestas masivas y actividades de sensibilización organizadas por comunidades y todo ello causa pérdidas para las empresas. Por este motivo, es mucho más rentable pasar a la colaboración y realizar las modificaciones que sean necesarias para que todas las partes estén satisfechas.
En este sentido, las ONG tienen el alcance y la visión de movilizar a cientos de personas a favor de una causa. Gracias a la colaboración actual de las compañías, tanto las empresas como las ONG trabajan de la mano y con el público en general. Este cambio disminuye las controversias, promueve el diálogo y genera el éxito total de los procesos empresariales. Existen diversos tipos de colaboración, como por ejemplo:
Según un estudio elaborado por ESADE y PwC, existen otras formas de realizar las alianzas. Entre las más importantes están: la filantropía corporativa y los patrocinios, el voluntariado corporativo y ejecutivo, la asistencia técnica y probono, la asociación de marcas para dar visibilidad, el marketing social, entre otras.
De acuerdo con una encuesta de la Fundación Hazlo Posible, en España, las ONG colaboran con las compañías por motivos de financiación (92 %), para desarrollar proyectos en conjunto (78 %) y para conseguir productos o servicios gratuitos (65 %). Por otro lado, las empresas colaboran con las ONG, principalmente, por su capacidad de aportar valor social en los sectores (88 %), involucrarse con la comunidad (67 %) y por la facultad de cambiar las cosas (60 %).
La responsabilidad social empresarial es muy importante en la actualidad. Es necesario mantenerse en paralelo a las nuevas tendencias y preferencias de los usuarios, leyes, políticas y otros factores que promueven los valores sustentables. Por ello, también es importante saber gestionar cualquier tipo de proceso con otra compañía, una ONG u otro tipo de institución que pueda apoyar con este objetivo.
Fuentes:
 
 Fundación Hazlo Posible. "Cuatro tipos de colaboraciones entre ONG y empresas".
Ayuda en Acción. "¿Por qué son necesarias las colaboraciones entre empresas y ONG?".
ESADE y PwC. Colaboraciones ONG y empresa que transforman la sociedad.
Ágora Social. "Cómo son las colaboraciones entre ONG y empresas".
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César Puntriano, profesor de ESAN Business Law, explicó que la alta informalidad laboral en el Perú, que afecta a 12 millones de personas, se ve desalentada por los elevados costos tributarios y laborales, así como por la excesiva burocracia. Sostuvo que los regímenes especiales no han funcionado y que los esfuerzos del gobierno han sido insuficientes, al no atacar el problema de fondo. Puntriano concluyó que revertir esta situación requiere voluntad política y una coordinación interinstitucional efectiva.
Walter Palomino, docente de los programas el área de Marketing de ESAN, destacó en Mercado Negro que el “Mundial de los Desayunos” de Ibai evidenció el poder del electronic Word of Mouth (eWOM). Los millones de likes al pan con chicharrón no solo aseguraron su triunfo, sino que detonaron conversaciones offline y mayor consumo local.