"Quien estudia una maestría es un ejecutivo que está desarrollando su línea de carrera y se encuentra en proceso de ascenso profesional. La maestría se presenta como un impulsor que le permitirá seguir escalando posiciones dentro de la empresa o fuera de ella, también. Este crecimiento del ejecutivo incrementa su empleabilidad, competitividad y le genera más oportunidades laborales" afirma el profesor Wakabayashi al ser consultado sobre los beneficios que otorga estudiar una maestría.
Asimismo, señaló que es importante que una persona reflexione bien acerca de la motivación que se tiene para llevar un programa tan exigente.
"¿Para qué deseo seguir la maestría? ¿Simplemente para tener un título con determinadas horas de conocimiento o lo que quiero es realmente lograr un cambio, lograr impulsar mi sueño y ser capaz de ser mejor de lo que soy ahora?" reflexionó.
Finalmente, el profesor Wakabayashi se mostró cauto al señalar que un programa de este tipo debe ser estudiado en una institución que cumpla con determinados parámetros. "Las acreditaciones internacionales, profesores altamente calificados, posición en el ranking nacional e internacionales, oportunidades de intercambio y doble grado internacional con universidades de primer nivel son condiciones mínimas que se deben evaluar al momento de elegir dónde estudiar" manifestó.
Fuente: Suplemento Día 1. El Comercio.